lunes, 6 de abril de 2009

ANALISIS ECONOMICO

Por: C.P. Y M.F. Pedro Linares Manuel

El plan anticíclico no ha surtido efecto en el principal motor de crecimiento interno, debido a que el encadenamiento productivo de la mitad de las ramas económicas depende de la industria de la construcción.
Impulsar al sector de la construcción en la actual coyuntura económica resulta relevante si se considera que tiene un efecto multiplicador que repercute en beneficio de 37 de las 73 ramas económicas del país, así como en la generación de empleos directos e indirectos.
No obstante, en el sector el empleo se redujo 6.8 por ciento anual durante enero, lo cual equivale a una pérdida de 94 mil 178 puestos.
La industria de la construcción sigue sin reactivarse, pese a los esfuerzos por impulsar la infraestructura en el país, ya que sigue prevaleciendo un escenario de incertidumbre, principalmente para el sector privado, el cual está limitando de manera considerable las inversiones en proyectos.
En este entorno se prevé que el sector de la construcción muestre una contracción de 1.1 por ciento en su Producto Interno Bruto (PIB), cuando se den a conocer la cifra correspondiente al primer trimestre de 2009, acentuando la caída de 0.1 por ciento observada en igual periodo del año anterior.
La menor inversión fija en la construcción es lo que está ocasionando el deterioro, ya que en 2008, el indicador cayó 0.4 por ciento, después de un crecimiento constante durante los seis años previos, cuando arrojó un aumento de 4.2 por ciento en promedio anual.
Lo anterior se desprende de una evaluación del Área de Análisis Económico de EL FINANCIERO con base en datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), del Banco de México y del Grupo Scotiabank.
Además, la menor demanda de proyectos en la industria de la construcción ha generado un esquema de deflación de costos al observarse que en el primer bimestre del año, el índice general de costo de la construcción se redujo 0.5 por ciento, cuando en igual periodo del año anterior había crecido 4.1 por ciento.
En particular, los costos de la construcción de obras públicas muestran reducciones importantes, principalmente en asfalto, cuya disminución fue de 18.9 por ciento en el primer bimestre de 2009, mientras que en igual periodo del año anterior tuvo un aumento de 11.9 por ciento.
También las estructuras para la construcción tuvieron una reducción en sus costos de 16.8 por ciento en enero-febrero del presente año , en contraste con el aumento de 5.2 por ciento en igual lapso del año anterior.
El costo de la varilla se redujo 3.2 por ciento al primer bimestre de 2009, después de un incremento de 21.4 por ciento en igual periodo del año anterior.
Destaca que las obras que iniciaron mal el año son principalmente las referentes a electricidad y comunicaciones, ya que el valor de las construcciones se redujo 7.3 por ciento y las de petróleo y petroquímica bajaron 4 por ciento.
Por otro lado, los costos de materiales para construcción residencial bajan 0.4 por ciento, cuando el año pasado se había resentido un aumento de 5.8 por ciento.
Caen rendimientos de grandes constructoras
La tendencia negativa del sector de la construcción está reflejándose en las grandes firmas de este giro que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores, ya que sus rendimientos accionarios presentaron una caída de 9.4 por ciento de enero al 3 de abril del presente año, esto es, en el caso de las empresas que se dedican a obras de infraestructura.
En tanto que las que fabrican vivienda mostraron una contracción de 26.4 por ciento en promedio.
Ese comportamiento obedece principalmente al notable deterioro de la construcción de vivienda en el país ante la expectativa de menor demanda, así como a la falta de inversiones privadas ante el encarecimiento del crédito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario